domingo, 6 de octubre de 2013

El laberinto clásico

 Vaca trampa hecha por Dedalo. Pasífae, enamorada del toro de Creta, la utiliza para ser cubierta por él.

Ovillo de Ariadna unido al cordón umbilical de un niño, alusión al laberinto que une la vida a otra vida..

Laberintos rotos y unidos por una bañera. Fuga de espermas que rebosan el recipiente.

El laberinto clásico

Pienso que una de las series de las pinturas que expone Joan Cacals ilustra de manera voluntaria el laberinto de Creta y los acontecimientos que acompañan a Dédalo, su constructor, pero las obras están mal distribuidas y eso hace que el discurso quede roto, confuso e inexistente. Apoyado en la evidencia de los símbolos más importantes que describen el laberinto clásico, Joan utiliza una serie de recursos que le permiten describir y representar los personajes y lugares que intervinieron en aquella historia. Para ello hace servir la técnica de la pintura mural, trabajado de los fondos por separado y sobre ellos superpones los elementos narrativos. Pienso que es importante el ordenamiento de toda la historia y lo que ella representa para él en el presente, de lo contrario no se entenderá nada y se trata del relato y del hecho histórico más significativo de la cultura Minoica, hechos que tuvieron gran repercusión en la cultura mediterránea y en la obra del Joan…

Como él no dejó ninguna indicación escrita en el soporte de la obra, nada sobre que hacía y cuando lo hacía, ese era su carácter, es obligado leer lo que presenta. No podemos equivocarnos mucho de las intenciones del autor si partimos de la constatación repetida y variada de la imagen del laberinto y de los símbolos que presenta. Además encontramos otros elementos del relato ordenados de manera libre pero presentes, por lo que creo que el resto de símbolos también han de estar tratados entre las obras que guardan en el almacén... También puede pensarse que igual no terminó el relato, o bien, que algunos pasajes no le interesaron; eso puede crear lagunas, faltas en la comprensión, pero pienso que lo más importante está bien descrito en la obra.
Maneras de proceder.
Primero realiza el fondo con un rico cromatismo acercándose a los colores que hay sobre los muros del palacio de Ecnosos, colores planos que el tiempo ha desgastado. Sobre este fondo coloca los símbolos realizados con plantillas, también los signos que describen a los personajes, especialmente las obras de Dédalo. En algunos casos las plantillas le permiten replicar una imagen de manera que el nexo de unión narre la historia. Esa leyenda actualmente queda por esclarecer ya que las obras están desordenadas. Pensemos que una pajarita de papel explica la habilidad del papiroflexa y el conocimiento del geómetra. En ella está el artífice de la forma y también la forma básica de todas las aves. Así esa sencilla forma puede representar a una perdiz, si son cuatro forman una nidada en el momento de nacer.

El correr de los perdigachos fue uno de los temas que se bailaban en creta y se sabe que Dédalo, el artífice del laberinto, construyó antes una pista de baile para Ariadna cuando era niña. Podemos entender en la obra que el ilustrador se vale del recurso de la repetición y la replica para aumentar el numero y ordenar la lectura. Así lo hace también con muchas otras cosas, alas, hombres y barcos. De la misma manera los laberintos y otros elementos del cuadro son reproducidos con la técnica de estarcido. Para entender el cuadro, por ejemplo la aparición de los barcos, se ha pensar en lo acontecido en la historia. Tenemos que unir el símbolo a la circunstancia de que Minos consiguió reunir en aquel entonces la mayor potencia naval del mediterráneo…

Pronósticos.
Pienso que es necesario que aparezca en la serie la figura de un hombre o dos, Dédalo i su hijo Ícaro. La imagen de una niña y una mujer, Ariadna de niña para la cual Dédalo hizo la pista de baile y su madre Pasífae; diosa de la fertilidad asociada a la luna. Puede aparecer en su lugar la luna y en el caso de Ariadna un ovillo de hilo unido al laberinto y a la salvación; una alusión al nacer y emerger a la luz. Es muy probable que aparezca también la figura de una vaca; segundo trabajo asombroso que realiza Dédalo a petición de Pasífae. No es una vaca real, es un señuelo con el cual ella puede copular con el toro de Creta y quedar en cinta. Este es el grueso del relato ya que de ese embarazo llegará a nacer el Minotauro. Creo recordar que la obra en cuestión está en la exposición del museo, es la que presenta el laberinto como soporte para la cabeza de una vaca, a su vez, en el aire flotan y corren vientos como espermas dorados. Han de aparecer ranas, escorpiones, lagartijas, culebras y bichos malignos. Son los que salen de la eyaculación de Minos cuando le es infiel a su mujer; causa de la maldición que Pasífae le adjudicó. Tiene que encontrarse explicada la historia de Ícaro, las alas, la isla de Icaria, un hombre muerto en el suelo, los brazos que soportan las alas, Teseo y la espada, un hombre de aspecto monstruoso, el minotauro, creo que este también está en el museo. Es un gorila o un hombre negro, aunque también aparece en uno de los dibujos de la última época, el que presenta en oscuro un hombre de espaldas y un cruasán en el suelo que lo convierte en cuernos ocasionales…

Con relación a la persecución que Minos hace sobre Dédalo hasta llegar a las tierras de Cócalo, tiene que aparecer un molusco y una hormiga. Es el ardid, el engaño que Minos elabora para atrapar a Dédalo. Sabe que solo él puede resolver el enigma de cómo pasar un hilo por el laberinto de una caracola. Dédalo cae en la trampa y ayudado por su ingenio enlaza el hilo a una hormiga y esta atraviesa los oscuros y retorcidos corredores sin problema alguno; así atrapan a Dédalo, el cual cayó víctima de su propia vanidad.

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